miércoles, 28 de mayo de 2008

Mi libertad acaba donde empieza tu libertad.

Durante un paseo por una calle comercial, podemos ser filmados por unas veinte cámaras de seguridad.

En un viaje de Madrid a Londres, nos piden la documentación, pasamos por varios controles de seguridad, nos cachean, nos descalzan, nos registran las bolsas personales, nos confiscan los líquidos, las medicinas, los desodorantes,... y al llegar a destino, de nuevo nos hacen un control,...

Y lo curioso de todo esto es que, a veces, al llegar a destino, no encuentras las maletas. O, en el peor de los casos, te roban el bolso.

¿De qué sirve tanto control si después no hay una verdadera seguridad?

Hoy un español, David Raya, ha denunciado ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo las excesivas medidas de seguridad existentes para acceder a los aviones, que por su situación personal, debido a que sufre fibrosis quística y diabetes y necesita múltiples medicinas, le suponen un trato "abusivo", "absurdo" y "discriminatorio".

Es excelente saber que en caso de no estar de acuerdo con una normativa internacional, un ciudadano de a pie puede alzar la voz en las más altas instancias de gestión de la Unión Europea, donde residen casi 500 millones de personas.

4 comentarios:

Sara dijo...

Pues muy interesante el tema, si señor!!!
En cuanto a la LIBERTAD ya lo dice un amigo en su blog, es una de esas reinas sin reino y yo estoy en acuerdo total con él.

En cuanto a la seguridad no percibo yo que vivamos en una sociedda muy segura ¡que digamos!ya vemos un pequeño reflejo en nuestros blogs, todo lo que denunciamos y a veces, sólo nos queda pedir que caigamos en manos de buenas personas...¡porque con lo que hay por el mundo!

Y en cuanto a las quejas creo que somos una sociedad que nos quejamos muy poquito, ojalá cunda el ejemplo de David Raya.

Buenisima entrada

Un abrazo y gracias por vuestras muestras de cariño en mi blog.

Anónimo dijo...

Muchas gracias por tu comentario, la verdad es que no se me olvidará nunca el aniversario de mi blog, me han animado mucho a compartir estos poemas que suelo escribir desde hace tiempo ya, intentaré subir cada día alguno, siempre que mis turnos de trabajo y demás me lo permitan.
Si no te importa te enlazo en mi blog para pasarme habitualmente por aquí.
Y desde luego que comparto lo que dices en tu blog, yo que pertenezco a un colectivo que ha avanzado paso a paso a base de quejas, de alzar la voz para mejorar nuestras duras condiciones de trabajo y a veces más solos que la una.
un saludo

Hoy quiero contarte dijo...

y mi libertad empieza donde empieza la tuya. Hacía dias que no posteaba, pero hoy me he prometido encontrar un ratillo para los amigos, y mira por donde, estás entre ellos. Un besazo.

Anónimo dijo...

¡Buen poeta! casi na..."no se si soy poeta o muro de piedra envejecido" sólo intento expresar lo que siento, noto, o veo en diferentes momentos pues la vida y el di a adía es una musa inagotable, a veces triste y otras alegre.
Gracias por tus ánimos y un saludo.