lunes, 11 de febrero de 2008

Por un mundo mejor

El otro día oí que en un pueblo de Reino Unido ha prohibido el uso de bolsas de plástico. La verdad es que la noticia se centraba en la carnicería del pueblo que, después de realizar las necesarias adaptaciones a nivel del funcionamiento del establecimiento, como las bolsas que se entregan a los clientes con las compras.

Pero lo más interesante es que, una vez se consiguieron adaptar, resulta que las mercancías que llegaban de sus proveedores lo hacían en bolsas de plástico. Y aprovechaban para lanzar su queja más enérgica contra ellos y denunciar su imposibilidad para poder cambiar los hábitos de sus proveedores.

Está claro que cuando uno se esfuerza en materia de ecología se vuelve más exigente para con los demás y su entorno. Una buena manera de conseguir cambiar las cosas: las bolsas de plástico.

Por cierto, en un pueblo de mi provincia han regalado 70 carritos de la compra para reducir el uso de bolsas de plástico. Por cierto, los carritos, de material reciclado. Esto se contagia.

No hay comentarios: